Un general de la Guardia Nacional informó que la mayoría de los 1.000 efectivos que resguardarán la frontera sur de Estados Unidos ocuparán puestos de observación y detendrán personas sólo si interfieren con su misión.
El ayudante general de Texas, John Nichols, dijo a The Associated Press el 22 de julio que las tropas ayudarán a disuadir el tráfico ilícito de los menores no acompañados que cruzan la frontera.
El gobernador republicano de Texas, Rick Perry, anunció la participación de la Guardia Nacional el 21 de julio.
Nichols señaló que los soldados estarán armados por su seguridad y tratarán de evitar la detención de las personas, para lo cual contactarán a la policía estatal.
Agentes estatales podrían arrestar a sospechosos de cometer un delito estatal o llamar a la Patrulla Fronteriza si entraron ilegalmente al país.
Nichols dijo que los entrenamientos comenzaron de inmediato a considerar escenarios como niños inmigrantes que se entreguen.