Inflación, un mal latente para los venezolanos en 2019

Henkel García, experto financiero y director de Econométrica, asegura que si bien todos los medidores van a la baja, el país sigue en hiperinflación.

Edith Sánchez sale de un supermercado en el este de la capital venezolana con un paquete de galletas. Su plan era comprar una bolsa de pan blanco de molde, pero no pudo. Estaba muy caro, confiesa.

“Tú no te puedes comprar nada ya porque nada te alcanza, el dinero no te alcanza. Te puedes llevar una bola de billetes y no te alcanza”, explicó esta ama de casa jubilada a la Voz de América.

Ella es solo uno de los ciudadanos ‘de a pie’ atrapados en medio de la crisis económica que vive la nación suramericana. El Banco Central de Venezuela (BCV) rompió su silencio parcial sobre los datos de la economía del país el pasado 5 de febrero al revelar que la inflación de 2019 fue del 9.585,5%, aunque con un tendencia a la baja durante el año.

Sánchez asegura que la situación que reflejan estos números es “horrible” y afirma que el pueblo venezolano está pasando muchos apuros y que ella, para poder sortear la inflación, compra “tres cositas nada más”.

La cifra presentada por el BCV es aún mayor que la recogida por la Asamblea Nacional, de mayoría opositora, que apunta a una inflación en 2019 de 7.374,4 %.

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Ángel Alvarado, economista y diputado que formó parte de la comisión de finanza del Parlamento, sostiene que la variación se debe a las muestras de cada uno de los estudios, que "no reflejan el universo de los bienes y servicios”.

Para el parlamentario, sin embargo, estos datos significan que hay una “expropiación silenciosa del salario del trabajador” y son un “reflejo de la quiebra del Estado venezolano”.

Carmen Mata, encargada de un pequeño local de comida en el este de la capital del país, concuerda al señalar que todo está “carísimo” y que ha tenido que diversificarse e incluso “perder la esencia del local”, anteriormente solo de postres, para poder mantenerse.

“Nosotros acá en el localcito para poder comprar y vender, hay cosas que no fabricamos, y entonces tenemos que comprárselo a otro proveedor, y para nosotros poner el precio, no podíamos, y dejamos de vender muchas cosas (…) prácticamente estamos trabajando con las uñas”.

Según, el Banco Central el precio de los alimentos aumentó 7.981,4 % en 2019. Pero no fue el sector que más aumentó, siendo los servicio de vivienda (22.045%) y de educación (18.861%) los que presentaron una mayor variación en los precios.

Es por ello, afirma Mata, que “muchas personas no pueden comerse algo en la calle”. “Todos los días hay que estar pendiente del precio, entonces sube y baja. Y uno no puede tener al cliente que hoy tiene un precio y mañana tiene otro”, agrega.

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Sin créditos y todavía con hiperinflación

Henkel García, experto financiero y director de Econométrica, asegura que si bien todos los medidores -públicos y privados- van a la baja, el país sigue en hiperinflación, una tendencia que sigue siendo “muy dañina”.

García adelantó que solo en enero de este año, fue superior a 80%, según los datos de su firma.

El hecho, señaló, de que el gobierno en disputa haya decidido publicar los datos -por tercera ocasión desde mayo de 2019 - “va en línea con todo un cambio en la manera de llevar la economía” y de ser un poco más “transparente” y “pragmático”, apuntó el especialista a la VOA.

A pesar de ello, Garcia considera que es un movimiento “tímido” y apunta que la baja se logró gracias a la práctica prácticamente desaparición del crédito bancario. “Un grupo importante de empresas no fue viable financieramente en 2019 porque simplemente le quitaste una fuente de financiamiento vital para el funcionamiento de cualquier empresa”, lamentó.

“Desinflaste, pero con el precio a pagar de una mayor contracción económica”, concluyó.

El gobierno en disputa de Nicolás Maduro ha culpado de la crisis que atraviesa el país a la “guerra económica” que mantiene con EE.UU. y con otras naciones. Sin embargo, la administración sostiene que el 2020 será el año de “reinicio del crecimiento económico”.