Líderes mundiales llegan al Vaticano

El vicepresidente Joe Biden junto al primer ministro italiano, Mario Monti, pasa revista a la guardia de honor a su llegada a Roma.

El vicepresidente Joe Biden encabeza la delegación estadounidense que estará presente durante la misa inaugural del papa Francisco, este martes, en Roma.
La delegación estadounidense encabezada por el vicepresidente, Joe Biden, fue una de las primeras en arribar a Roma para participar en la misa inaugural del papa Francisco, en el Vaticano.

El presidente de Italia, Giorgio Napolitano, dio la bienvenida a Biden y ambos compartieron unos minutos durante los cuales bromeraron sobre la rapidez con la que se eligió al nuevo Papa.

"Estoy muy complacido de estar aquí por el papa Francisco. Él comparte una visión con respecto a atender a lo pobres y a los desposeídos”, dio Biden. “Este es un momento feliz”, agregó el vicepresidente de EE.UU.

Joe Biden se reúne con el presidente de Italia, Giorgio Napolitano.



Igualmente la presidenta de Argentina, Cristina Fernández, llegó con tiempo para reunirse con su compatriota, quien ahora es el representante de Cristo en la Tierra para felicitarlo e intercambiar abrazos y regalos significativos.

Mientras Roma se prepara para la celebración del martes, festividad de San José en el calendario católico, van llegando las delegaciones de todo el mundo donde los presidentes de Latinoamérica juegan un papel fundamental al considerar que se trata del primer Papa de la región.

Han confirmado su asistencia la presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla; Sebastián Piñera, de Chile; el presidente de Ecuador, Rafael Correa; y Enrique Peña Nieto, encabezando la delegación mexicana.

Los gobernantes de Colombia Juan Manuel Santos, y de Perú, Ollanta Humala no tienen previsto acudir a la ceremonia.

En la misa, Francisco recibirá el anillo "pescador" de almas en referencia al apóstol Pedro, símbolo del papado, que le será colocado en el dedo anular de su mano derecha.

También se impondrá sobre los hombros del nuevo pontífice el palio tejido por monjas benedictinas con lana de ovejas bendecidas. Se trata de una banda blanca con seis cruces rojas, que simboliza la autoridad pastoral y el servicio al pueblo de Dios.

Finalizado el ritual, Francisco quedará oficialmente investido como el papa 266 de la historia de la Iglesia católica.