El secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, dijo el miércoles que buscará movilizar a actores internacionales clave para presionar a Birmania y “asegurar” que fracase el golpe militar de esta semana.
“Es absolutamente inaceptable después de elecciones, elecciones que creo que transcurrieron normalmente. Y después de un largo período de transición, es absolutamente inaceptable que anulen el resultado de las elecciones y la voluntad del pueblo”, declaró Guterres en una discusión en línea con el periódico The Washington Post.
Los militares birmanos, conocidos como el Tatmadaw, tomaron el poder el lunes, declararon un estado de emergencia de un año y arrestaron a la líder de facto Aung San Suu Kyi y al presidente U Win Myint, entre otros.
El golpe tuvo lugar después de días de tensiones entre los militares y la gobernante Liga Nacional para la Democracia (LND), que ganó las elecciones de noviembre. El Tatmadaw se negó a aceptar los resultados, alegando fraude masivo.
Guterres dijo que, en todo caso, la líder de la LND, Aung San Suu Kyi “estaba demasiado vinculada con los militares” al defender la brutal ofensiva del Ejército contra los musulmanes rohinyá, que obligó a casi un millón de personas de esa etnia a escapar a la vecina Bangladesh hace tres años.
“Confío en que la democracia sea capaz de progresar de nuevo en Birmania”, dijo Guterres. “Para ello, todos los prisioneros deben ser liberados, el orden constitucional restablecido, y espero que la comunidad internacional sea capaz de presentar un frente unido”.
También lea Birmania acusa a Aung San Suu Kyi de violar ley de importación y exportaciónCargos a los detenidos
Anteriormente el miércoles, las autoridades en Birmania presentaron cargos contra Aung San Suu Kyi por importar ilegalmente seis radios walkie-talkie encontrados en su casa en la capital Naypyitaw durante un registro.
Su partido LND dijo por Facebook que se había ordenado su detención por dos semanas. Las autoridades también allanaron oficinas del partido en múltiples regiones del país.
El presidente Win Myint fue acusado, por su parte, de violar las medidas de prevención contra el coronavirus en sus campañas para las elecciones de noviembre.
En Washington, el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, dijo que Estados Unidos se sentía “perturbado” por los nuevos cargos.
“Llamamos a los militares que liberen inmediatamente a todos los líderes civiles y políticos, periodistas y activistas de derechos humanos detenidos, y que se restaure el poder al gobierno democráticamente elegido”, dijo Price.
Agregó que “como dijo el presidente (Joe) Biden, el golpe militar es un asalto directo contra la transición del país a la democracia y al estado de derecho”.