Esta es la tercera visita a Caracas del Fiscal de la Corte Penal Internacional, quien este jueves se reunió con el presidente Nicolás Maduro y los titulares de la Fiscalía General y el Tribunal Supremo.

Después del encuentro, Maduro escribió en su cuenta en Twitter que seguirá ampliando los mecanismos de trabajo con la CPI.

El año pasado el Fiscal Khan anunció la apertura de una oficina de la Corte en Venezuela, de la que hasta ahora no se conocen más detalles.

"El objetivo de esa oficina es dotar de asistencia técnica a funcionarios estatales para la conducción de investigaciones y enjuiciamientos a nivel interno. Esta oficina no va a atender las denuncias de violaciones de derechos humanos o de crímenes de competencia de la Corte ", explic a el abogado Omar Piñango, miembro de la ONG Defiende Venezuela.

Hace apenas un mes, la Fiscalía de la Corte recibió 8 mil 900 testimonios de venezolanos que se consideran víctimas de torturas, persecución, violencia sexual y otros abusos por parte del Estado. No en vano, defensores de derechos humanos advierten que el trabajo de la Corte puede demorar años.

"Para siquiera librar una orden de arresto o una orden de comparecencia, son procesos que toman tiempo, por eso no debemos hablar de corto plazo". añade Piñango.

Mucho antes de esta reunión, la administración de Nicolás Maduro señaló a la Fiscalía de la CPI de tener "vínculos probados" con organizaciones opositoras y aseguró que sus averiguaciones sobre Venezuela están basadas en denuncias sin pruebas.

La Fiscalía de la Corte Penal Internacional busca determinar si en Venezuela se cometieron crímenes de lesa humanidad durante las protestas antigubernamentales de 2017, en las que fueron asesinados al menos 157 manifestantes, y si el Estado ha hecho lo suficiente para castigar a los responsables.