Las administración Trump dijo el miércoles por la noche que quiere reducir el número de refugiados que admite Estados Unidos a 15.000 en el año fiscal de 2021, que comienza este 1 de octubre.
La cifra es la menor de una serie de recortes anuales desde que el presidente Donald Trump tomó posesión en 2017.
En 2020, la administración puso el tope en 18.000, y en el país entraron 10.892 refugiados antes de que el programa quedara en suspenso a causa de la pandemia del coronavirus.
También fue el número más bajo desde que el programa moderno de refugiados fue aprobado por el Congreso en 1980. El tope anual durante la administración del presidente Barack Obama fue de entre 70.000 y 85.000.
El Departamento de Estado dijo que la propuesta de Trump para 2021 “reafirma el continuo compromiso de Estados Unidos para asistir a la personas más vulnerables del mundo al tiempo que cumple su principal misión de proteger y servir al pueblo estadounidense”.
Por otra parte, Krish Vignarajah, presidente del Servicio Luterano de Inmigración y Refugiados, una agencia financiada por el gobierno federal encargada de reubicar a refugiados en Estados Unidos, calificó la decisión de “una completa abdicación de nuestro deber moral y de todo lo que defendemos como nación”.